Arce lleva cifras macro a Naciones Unidas y plantea siete problemas que debe atender el mundo

Compartir en

 

La guerra, cambiar el orden internacional, el sistema capitalista, crisis climática, DDHH, implementación de sanciones y Palestina fueron los siete temas que planteó Bolivia ante el 78º período de sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU). El presidente del Estado, Luis Arce, aprovechó para exponer datos de macroeconomía en el país olvidando los problemas que existen.

“Que se declare al mundo como territorio de paz, debemos poner fin de una vez por todas a la carrera armamentista y priorizar el diálogo sincero y la diplomacia de los pueblos para resolver los conflictos armados que amenazan la existencia de la humanidad”, dijo Arce ante el pleno de la Asamblea que coincidentemente estaba dirigida por el vicepresidente, el boliviano, Diego Pary.

Arce viajó este lunes a Naciones Unidas para asistir a este evento y luego de reuniones bilaterales que fueron pactadas tiene planeado su retorno a Bolivia. Su discurso duró 25 minutos. Las autoridades de Gobierno ya adelantaron que estará presente en el aniversario de Santa Cruz.

El jefe de Estado aprovechó para mencionar datos oficiales sobre macroeconomía de 2022 y dijo que el Producto Interno Bruto (PIB) nominal (valor monetario de la producción de bienes y servicios de demanda final) el año pasado llegó a $us 44.315 millones, superior al presentado en 2021. Sin mencionar cifras dijo que el PIB per cápita (bienes y servicios elaborados dentro del territorio nacional, tanto por empresas nacionales como extranjeras), se incrementó en 7,4% con respecto a la cifra de 2021. No llevó cifras de 2023.

Planteó romper el orden internacional existente en el mundo y dijo que las desigualdades provocarán inimaginables conflictos de distribución económica y ecológica en el futuro, por tanto, se requiere reconstruir la confianza, abandonar intereses mezquinos y forjar un desarrollo sostenible

Abogó por el cambio del sistema capitalista porque «multiplica y reproduce las formas de dominación explotación y exclusión». La crisis multidimensional del capitalismo se ha desnudado en el contexto de la postpandemia y afirmó que la guerra Rusia-Ucrania es una expresión de la transición hacia la configuración de un orden mundial.

En el cuarto punto planteó tomar acciones de inmediato frente a la crisis climática y los países desarrollados deben cumplir sus compromisos pendientes sobre la provisión de financiamiento, transferencia de tecnología y desarrollo de capacidades. “Hay un problema común y que empieza a pasar factura a los países más pobres, la escasez de agua y el incremento en la tasa de evaporación del agua dulce, instamos a nuestra Asamblea a prestar permanente atención a esta problemática”, exhortó el presidente boliviano.

El quinto problema abordado por Arce fue el de los DDHH y dijo que en Bolivia se ha comprendido que no hay democracia posible sin desarrollo y el desarrollo no puede tener mejor indicador que el ejercicio de los derechos colectivos promovidos, protegidos y garantizados por el Estado. Aunque las denuncias contra el Estado boliviano sobre la violación de derechos humanos son permanentes, especialmente desde colectivos sociales que abogan por presos políticos que el Gobierno se niega a admitir.

Las sanciones unilaterales desde los países desarrollados fue el sexto punto abordado por Arce y abogó por levantar el bloqueo contra Cuba desde Estados Unidos. Hace pocos días el gobierno estadounidense hizo conocer su informe sobre narcotráfico y sancionó a Bolivia sobre su tarea contra el flagelo; el Gobierno rechazó ese informe y mandó a EEUU trabajar en el consumo dentro ese territorio.

El caso palestino fue el último que abordó Arce y demandó el respeto de la autodeterminación y restitución de los límites fronterizos de ese país anteriores a 1967.

 

Compartir en

Deja tu comentario