Victoriano Ábrego es el décimo privado de libertad que perdió la vida en lo que va del año dentro de las cárceles del país. De forma extraoficial, se informó que el cuerpo del interno, quien estaba recluido en el penal de Palmasola de Santa Cruz, fue llevado a la morgue judicial de esa región, y presentaba una fractura en el cráneo, varios golpes y heridas producidas por un arma blanca.
Se presume que el hombre de 23 años fue agredido por otro grupo de internos en la sección del PC-3, donde fue llevado hace un tiempo desde otro recinto carcelario en Puerto Quijarro. Con este caso suman seis los presos muertos en las cárceles en medio de hechos violentos; el resto, presuntamente fallecieron por enfermedades.
“Él (Ábrego) fue trasladado a la cárcel de Palmasola desde Puerto Quijarro. A través de la autopsia se ha determinado que murió a raíz de un golpe en la cabeza; tiene el cráneo deshecho y heridas provocadas por arma blanca”, fue la información que dio la familia del recluso fallecido, según reporte de Unitel.
Página Siete trató de comunicarse con el gobernador del penal de Palmasola, Nicanor Corcuy, pero el funcionario no atendió las llamadas. Sin embargo, en contacto con medios locales el uniformado negó que Ábrego haya sufrido puñaladas y calificó el hecho como homicidio.
“Ayer (sábado) a las 15:30, el personal de seguridad informó que había un interno agredido por otro recluso. Activamos el protocolo de búsqueda e identificación de quienes participaron del homicidio”, explicó Corcuy.
El gobernador precisó que Ábrego cumplía una sentencia de dos años por el delito de robo agravado. La familia del interno fallecido aclaró que ya había cumplido un año de esa condena y en unos meses debía recobrar su libertad.
Corcuy identificó al interno Luis David Ríos Galvis como el responsable del deceso. Este último también cumple una condena por el mismo delito.
El oficial señaló que se realizaron varias pesquisas para dar con otros implicados en el crimen, por lo que otros cinco internos fueron aislados, debido a una posible complicidad con Ríos.
Otras muertes
El homicidio de Ábrego al interior del recinto penitenciario de Palmasola se produce en medio de una ola de críticas por las falencias en la seguridad carcelaria, ante la muerte de tres reclusos en el penal de Chonchocoro, en La Paz, y la muerte de otro reo en el penal de San Pedro, producto de una brutal golpiza.
Ese último caso trató de ser minimizado por el director departamental de Régimen Penitenciario, Franz Laura, quien declaró que el interno que murió en San Pedro de La Paz perdió la vida “de forma repentina” por una enfermedad.
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